2 Formas De Aceptar La Realidad
2 Formas De Aceptar La Realidad
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Dos formas de aceptar la realidad, tal y como es, pero siendo libre.
Aceptar la realidad puede ser uno de los procesos más difíciles y dolorosos por los que pasamos.
A veces, cuando la vida no refleja lo que esperábamos o deseábamos, nos invade una profunda frustración y negación.
Nos aferramos a lo que debería haber sido o nos quedamos atrapados en el "si tan solo…".
Es completamente natural querer que las cosas sean diferentes, especialmente cuando enfrentamos situaciones dolorosas o que nos descolocan.
El día de hoy quiero que hablemos de 2 formas de aceptar la realidad de una vez por todas.
Navegaremos por el proceso de de soltar con dos ejercicios prácticos que puedes aplicar en tu día a día.
Te dejo mi canal de youtube para que puedas ver y escuchar mar episodios
La ineficiencia de no aceptar la realidad
Aceptar la realidad es el fundamento de tener más flexibilidad psicológica y ser feliz.
Cuando nos forzamos a aceptar, podemos fantasear con como sería la situación de diferente,
Pero, ¿cambia algo si seguimos aferrados a lo que no podemos cambiar?
La respuesta, aunque difícil de aceptar, es no.
La realidad sigue siendo la misma, sin importar cuántos pensamientos o deseos tengamos sobre ella.
Es más, puede volverse más dolorosa y una lucha cuando no queremos aceptarla.
Aceptar lo que es no significa que no podamos hacer algo al respecto.
Sino que nos permite empezar a trabajar con la situación de una forma más consciente y constructiva.
Te invito a tomar estas herramientas y empezar a integrarlas poco a poco en tu vida.
1. Dale espacio al dolor: Aceptar que la realidad
El primer paso hacia la aceptación es ser honestos con nosotros mismos sobre lo que sentimos.
A menudo, intentamos evitar el dolor, la tristeza o la frustración que viene cuando las cosas no salen como queríamos.
Este rechazo al dolor nos lleva a una especie de resistencia constante, que solo aumenta nuestra angustia.
Te lo explique en el episodio de "Huir del sufrimiento"explicándote porque no debemos de huir o rechazarlo.
Es importante dar espacio al dolor.
Reconocer que la realidad no es lo que yo desearía puede ser doloroso, pero es necesario para empezar a soltar.
Imagina que terminaste una relación, pero te niegas a acpetarlo, esto hace el dolor más profundo y lo perpetua.
El primer paso no es cambiar lo que está pasando, sino permitirte sentir lo que necesitas sentir sin juzgarte.
Por ejemplo, si algo no salió como esperabas (ya sea un proyecto, una relación, un plan de vida), es natural sentir tristeza, enojo o frustración.
Permítete sentir esas emociones sin apresurarte a “superarlas” o a buscar soluciones inmediatas.
Aceptar el dolor de la situación es la base para encontrar una forma más saludable de afrontarla.
Recuerda que aceptar te abrirá a soltar y dejar ir.
¿Cómo ponerlo en práctica? Aceptar la realidad
- Reconoce tus emociones: No las reprimas ni las ignores. Si sientes tristeza o enojo, permítete experimentar esas emociones sin sentirte culpable por ellas.
Cambia o que haces para que cambies lo que piensas - Exprésate: Habla con alguien de confianza o escribe lo que sientes. A veces, verbalizar el dolor puede ayudarte a procesarlo más rápido. Explora la emoción, en vez de alejarte de ella.
Acepta y fluye - Acepta el proceso: Entiende que el dolor no es permanente, pero lo que es importante es cómo lo gestionas. Al permitirte sentir y aceptar tu realidad tal y como es, le das espacio para sanar.
Beneficios:
- Menos resistencia interna frente al dolor.
- Espacio para el crecimiento emocional.
- Mayor claridad para tomar decisiones más saludables.
2. Visualiza la realidad tal y como es: Enfócate en lo que puedes hacer AHORA
Una vez que hemos permitido que el dolor ocupe su espacio, el siguiente paso es enfocarnos en la realidad tal y como es, sin quedarnos atrapados en los "¿y si?" o los "debería haber sido".
A menudo, nuestra mente se queda atrapada en el pasado, en cómo las cosas habrían sido si las circunstancias hubieran sido diferentes.
Fantaseamos con escenarios alternativos, pero, como sabemos, eso no cambia la realidad.
En lugar de seguir atrapados en lo que no podemos cambiar, visualiza lo que puedes hacer ahora.
Esta es una herramienta poderosa que te ayuda a mover la atención de lo que falta, hacia lo que sí está disponible para ti en este momento.
Al cambiar tu enfoque, comienzas a tomar control de la situación y a actuar desde un lugar de claridad.
¿Cómo ponerlo en práctica?
- Acepta lo que está sucediendo: Si algo no salió como esperabas, lo primero es aceptar que eso es lo que está sucediendo ahora. No te quedes en la fantasía de un “qué hubiera pasado si…” ni en la culpa de “debería haber hecho esto diferente”. Corrige esos pensamientos y redirigelos
- Visualiza tu siguiente paso: En lugar de quedarte pensando en todo lo que no puedes cambiar, pregúntate: ¿Qué puedo hacer ahora? Puede ser algo pequeño, pero lo importante es dar el primer paso hacia adelante, en lugar de quedarte atrapado en la parálisis de la indecisión.
Aceptar vs resignarse - Enfócate en el presente: Practica la atención plena (mindfulness) para estar presente en el aquí y ahora. Cada vez que notes que tu mente se desvíe hacia el pasado o hacia un futuro incierto, regresa al presente y pregúntate: ¿Qué puedo hacer con lo que tengo en este momento?
Meditacion para dejar ir
Beneficios:
- Fomenta la acción en lugar de la inacción.
- Reduces la ansiedad al concentrarte en lo que puedes controlar.
- Te empodera para tomar decisiones claras y realistas, incluso en tiempos de incertidumbre.