¿Cómo sé que es el indicado? // mi estándar en una relación

Encontrar a alguien que tenga una visión similar a la nuestra puede ser un trabajo arduo. A veces caemos en relaciones en las que no nos sentimos satisfechos, en las que no confiamos o simplemente no nos mantenemos en paz.

 Por esta razón debemos analizar antes de comenzar una relación para saber si esa persona cumple nuestro estándar, saber que la etapa antes de establecer una relación es la etapa de evaluación, en donde  evalúas si la persona que estás conociendo es la correcta y si vale la pena hacerla parte de tu vida. Esta parte es fundamental, porque  ya dentro de una relación es un poquito más complicado terminar o salir limpio de heridas.

 Una relación no se basa solo en factores superficiales como el atractivo físico, aunque el factor físico es significativo, no es el único o el más importante. Una relación se basa en respeto, lealtad, admiración, metas en común, detalles, atención, tiempo de calidad, comunicación, entre otras.

 Si no tenemos claro nuestro estándar y no sabemos lo que buscamos , será muy difícil elegir de forma correcta y muy fácil caer en relaciones en donde te sientas a medias.

 Por eso es importante conocerse bien a uno mismo (artículo de autoestima “conócete”) y colocar claro lo que aceptamos y lo que no ; lo que es negociable para nosotros y lo que no, de esta forma identificaremos con más facilidad a la persona que permitiremos que haga parte de nuestras vidas.

 Cada quien decide cuál es su estándar, no hay una lista de cosas ya escritas. Aunque sí, hay cosas sobreentendidas como el abuso en todas sus facetas,

 que es algo que nadie debería aceptar, pero, refiriéndonos a cosas mucho más específicas, así escoger una relación que nos llene, nos haga feliz y nos mantenga satisfechos.

 Pero, ¿y si no tengo un estándar aún? ¿si no sé por donde comenzar o crear mi estándar?

 Déjame ayudarte, lo primero que debes de hacer para crear tu estándar es un bolígrafo y un papel. Antes de eso puede que necesitemos de un trabajo personal, en nuestras actitudes, valores y autoestima.

Identifica que cosas son las más importantes en tu vida, tu familia, las actividades más importantes, las cosas que crees y los valores que tienes; desde allí partiremos.

ejemplo: Si para ti tu familia es importante, quizás alguien que le guste pasar tiempo en familia, disfruta de la compañía de sus seres queridos podría ser un estándar. 

 Si eres alguien que cuida su salud y le gusta hacer actividad física, puede que quieras a alguien que tenga la misma preocupación que tu.  

Haz una lista de cualidades que quieres que tu futura pareja tenga. 

 Atento, que te de espacio para tus actividades, que sea romántico con los detalles, que sea leal, que ame su familia, que se preocupe por su salud.

 Entre una y otra cosa, hay miles de cualidades que puedes colocar en tu lista, todo depende de lo que tu estás buscando.

 Luego de terminar con las cualidades haz dos listas paralelas de lo negociable y lo no negociable.

ejemplo: 

 Esta lista es un ejemplo de cosas que puedes poner, para que escojas qué  cosas son negociables debes de pensar ¿estoy bien con esto? ¿no me importaría si bebe alcohol cuando salimos? Podrías ser más específica,  por ejemplo, que beba alcohol es negociable, siempre y cuando no beba todos los días, ni se emborrache. Y así con cada cosa negociable que pongas, analizar cuidadosamente si es algo que a ti no te molesta y estar consciente que aceptas las consecuencias de aquello. Por ejemplo; si aceptas a alguien que beba alcohol tienes que estar consciente que algunas veces tenga aliento de alcohol o que debes aceptar que beba cuando salen sin prohibir, si esas cosas no te molestan, entonces es algo negociable. Así por delante con cada cosa que sea importante para ti.

 Ahora, si conoces a alguien y te das cuenta que tiene cosas que para ti no son negociables, no debes pasarlas por alto, las comunicas o simplemente no continuas frecuentando a esa persona. Debes aprender a respetarte a ti misma, saber que antes de todo estas tu, tu eres la que sabes que cosas no te dejarán ser feliz, de esta forma te muestras respeto y confianza. No hay nada peor que aceptar cosas que sabes que están fuera de tu estándar con la esperanza de que la persona cambiará porque te ama. No tomes a la ligera estas cosas, porque a la larga te harán infeliz, no guardes esperanzas de que alguien cambiará por amor o con el tiempo. Siempre lo repito nadie cambiará por nosotros, las personas cambian por ellas mismas.

 No aceptes menos de lo que sabes que mereces, tu también haz trabajado en tus valores, tu valor romántico, tu físico, tu salud. Tienes derecho a buscar en otros cosas que te complementen.

Para muchos las conversaciones fluidas, de temas diversos son muy importantes en una relación, hablar de historia hasta extraterrestres, hablar de cosas que aún no tienen respuestas o simplemente problemas sociales, pero, Si estás conociendo a alguien que sientes que las conversaciones son forzadas, limitadas, que la persona no se interesa por nada de lo que hablas o no hay una conexión ¿para que seguir intentando algo que ya vistes que no te llena? 

El problema es que muchas veces vamos en contra de lo que buscamos, solo porque nos impacto una carita bonita o porque creemos que no tendremos otra oportunidad de conocer a alguien más. No tengas miedo, siempre habrán personas que puedan complementarnos, con quien podamos trabajar en equipo, lo más importante es nunca olvidar que tu debes estar bien contigo misma y trabajar en tu autoconfianza, para decir, NO, cuando sea necesario.

 Encontrar a alguien que tenga una visión similar a la nuestra puede ser un trabajo arduo. A veces caemos en relaciones en las que no nos sentimos satisfechos, en las que no confiamos o simplemente no nos mantenemos en paz.

Por esta razón debemos analizar antes de comenzar una relación para saber si esa persona cumple nuestro estándar, saber que la etapa antes de establecer una relación es la etapa de evaluación, en donde  evalúas si la persona que estás conociendo es la correcta y si vale la pena hacerla parte de tu vida. Esta parte es fundamental, porque  ya dentro de una relación es un poquito más complicado terminar o salir limpio de heridas.

Una relación no se basa solo en factores superficiales como el atractivo físico, aunque el factor físico es significativo, no es el único o el más importante. Una relación se basa en respeto, lealtad, admiración, metas en común, detalles, atención, tiempo de calidad, comunicación, entre otras.

Si no tenemos claro nuestro estándar y no sabemos lo que buscamos , será muy difícil elegir de forma correcta y muy fácil caer en relaciones en donde te sientas a medias.

Por eso es importante conocerse bien a uno mismo (artículo de autoestima “conócete”) y colocar claro lo que aceptamos y lo que no ; lo que es negociable para nosotros y lo que no, de esta forma identificaremos con más facilidad a la persona que permitiremos que haga parte de nuestras vidas.

Cada quien decide cuál es su estándar, no hay una lista de cosas ya escritas. Aunque sí, hay cosas sobreentendidas como el abuso en todas sus facetas, que es algo que nadie debería aceptar, pero, refiriéndonos a cosas mucho más específicas, así escoger una relación que nos llene, nos haga feliz y nos mantenga satisfechos.

Pero, ¿y si no tengo un estándar aún? ¿si no sé por donde comenzar o crear mi estándar?

Déjame ayudarte, lo primero que debes de hacer para crear tu estándar es un bolígrafo y un papel.

Antes de eso puede que necesitemos de un trabajo personal, en nuestras actitudes, valores y autoestima.

Identifica que cosas son las más importantes en tu vida, tu familia, las actividades más importantes, las cosas que crees y los valores que tienes; desde allí partiremos.

ejemplo:

Si para ti tu familia es importante, quizás alguien que le guste pasar tiempo en familia, disfruta de la compañía de sus seres queridos podría ser un estándar. 

Si eres alguien que cuida su salud y le gusta hacer actividad física, puede que quieras a alguien que tenga la misma preocupación que tu.  

Haz una lista de cualidades que quieres que tu futura pareja tenga. 

Atento, que te de espacio para tus actividades, que sea romántico con los detalles, que sea leal, que ame su familia, que se preocupe por su salud.

Entre una y otra cosa, hay miles de cualidades que puedes colocar en tu lista, todo depende de lo que tu estás buscando.

Luego de terminar con las cualidades haz dos listas paralelas de lo negociable y lo no negociable.

ejemplo:

Esta lista es un ejemplo de cosas que puedes poner, para que escojas qué  cosas son negociables debes de pensar ¿estoy bien con esto? ¿no me importaría si bebe alcohol cuando salimos? Podrías ser más específica,  por ejemplo, que beba alcohol es negociable, siempre y cuando no beba todos los días, ni se emborrache. Y así con cada cosa negociable que pongas, analizar cuidadosamente si es algo que a ti no te molesta y estar consciente que aceptas las consecuencias de aquello. Por ejemplo; si aceptas a alguien que beba alcohol tienes que estar consciente que algunas veces tenga aliento de alcohol o que debes aceptar que beba cuando salen sin prohibir, si esas cosas no te molestan, entonces es algo negociable. Así por delante con cada cosa que sea importante para ti.

Ahora, si conoces a alguien y te das cuenta que tiene cosas que para ti no son negociables, no debes pasarlas por alto, las comunicas o simplemente no continuas frecuentando a esa persona. Debes aprender a respetarte a ti misma, saber que antes de todo estas tu, tu eres la que sabes que cosas no te dejarán ser feliz, de esta forma te muestras respeto y confianza. No hay nada peor que aceptar cosas que sabes que están fuera de tu estándar con la esperanza de que la persona cambiará porque te ama. No tomes a la ligera estas cosas, porque a la larga te harán infeliz, no guardes esperanzas de que alguien cambiará por amor o con el tiempo. Siempre lo repito nadie cambiará por nosotros, las personas cambian por ellas mismas.

No aceptes menos de lo que sabes que mereces, tu también haz trabajado en tus valores, tu valor romántico, tu físico, tu salud. Tienes derecho a buscar en otros cosas que te complementen.

Para muchos las conversaciones fluidas, de temas diversos son muy importantes en una relación, hablar de historia hasta extraterrestres, hablar de cosas que aún no tienen respuestas o simplemente problemas sociales, pero, Si estás conociendo a alguien que sientes que las conversaciones son forzadas, limitadas, que la persona no se interesa por nada de lo que hablas o no hay una conexión ¿para que seguir intentando algo que ya vistes que no te llena? 

El problema es que muchas veces vamos en contra de lo que buscamos, solo porque nos impacto una carita bonita o porque creemos que no tendremos otra oportunidad de conocer a alguien más. No tengas miedo, siempre habrán personas que puedan complementarnos, con quien podamos trabajar en equipo, lo más importante es nunca olvidar que tu debes estar bien contigo misma y trabajar en tu autoconfianza, para decir, NO, cuando sea necesario.