No les ha pasado que sienten que todo les sale mal, que hay personas que han hecho lo mismo que ustedes y mágicamente tienen éxito.
Cuando hablo de ese éxito, no solo me refiero a lo profesional, pero, miras a tu alrededor y ves a esas amigas que tienen relaciones amorosas increíbles, que se casan con los hombres más guapos, amorosos y fieles, que financieramente les va bien, que pareciera que la suerte y la abundancia las persigue
Pero ahí estás tú, luchando por encontrar por lo menos a tu peor es nada o simplemente nunca pasas de la primera cita, construyes relaciones con los famosos patanes, te sientes insegura, no te gusta tu trabajo o estas siempre contando las monedas de tu bolsillo a ver si te alcanza para comprarte la empanada de la esquina.
¿cómo la vida puede ser tan mala para algunos y tan buena para otros?
¿Será que existe una formula secreta? o ¿qué estas haciendo algo que atraes esas situaciones a tu vida?
Así como nos sentimos así formaremos las situaciones a nuestro alrededor, muchas veces nos damos mediocridad a nosotras mismas y por eso recibimos mediocridad de todo lo que nos rodea.
La mediocridad puede verse desde la hora en que escoges el shampoo que vas a usar, quieres uno, pero, escoges el otro que que esta a 10 centavos más barato por que “como es posible que que gastes 10 centavos más en un shampoo” aunque sea el que te guste, jamás podrías permitirte eso, como si 10 centavos hicieran la diferencia entre la banca rota y las riquezas. Estas decisiones de mediocridad van desde cosas tan pequeñas hasta la universidad donde estudias, la carrera que escoges y la pareja que tienes al lado tuyo.
Aunque parezca una tontería a través de este tipo de situaciones el único mensaje que enviamos es que no somos merecedores de lo que queremos, que nos conformamos con lo poquito, es inevitable que ese tipo de sentimientos (el como te sientes contigo misma) sea percibido por los que te rodean, es así como todos te verán, te trataran y te rodearan, como alguien que no merece sus deseos, que se conforma con la mediocridad
La realidad es que al salir de ese estado de “no soy merecedora” las cosas cambian, para para pensar…. ese chico que te gusta, ese que para ti es tan atrayente, ¿crees que él podría fijarse en ti? y responde con toda sinceridad. Él problema es que la mayoría de las veces la respuesta es no, no, cómo él se fijaría en una mujer como yo, tan poco atractiva y ese es el mensaje que envías y al final será como tu dices, en realidad él jamás se fijaría en ti, no por que no seas bonita o atractiva, simplemente por que tu te crees así y todo lo que creas de ti los demás lo creerán. Recuerda que la mayoría de las veces no es el pensamiento tan claro como el decir “soy fea” o “no soy suficientemente bonita o buena para él” quizás no es un pensamiento claro pero si un sentimiento, tienes que analizar tus sentimientos, como te sientes respecto a esa situación, nos sentimos menos, no capaces, rechazadas o inseguras.
El secreto para salir de esta situación es uno solo, cambiar esa perspectiva de ti, del como te sientes frente a las situaciones de la vida y frente a las otras personas.
¿cómo hacerlo?
Simple, aunque no rápido, es un proceso de cambio de mentalidad lo que llamamos como condicionamientos, cambiar esos pensamientos e ideas que han sido creadas desde nuestra niñez, puede que tome su tiempo, pero irás viendo los resultados a medida que tu perspectiva de ti misma vaya cambiando.
Crea situaciones que te creen sensaciones y sentimientos positivos de ti, que te creen sentimientos de abundancia y merecimiento.
1. Podrías comenzar a comprar ese shampoo que está 10 centavos más caro aunque parezca una insignificante te brindaría satisfacción diaria a la hora de bañarte todos los días, es algo que te puedes permitir y que creará una sensación diferente cada día cuando vayas a lavarte el cabello.
2. hora del baño: Un dato de mí es que amo la hora del baño y más con agua caliente, imaginen teniendo una tina de baño y si no la tienes da igual, podrías convertir ese momento en algo increíble, que tal si pones velas, una musiquita y tienes tu momento contigo misma, ¿sabes las sensaciones que creas con eso?¿cómo te sentirías haciendo eso todas las noches? es una sensación de ” es mí momento” “yo merezco” “me amo”
entre millones de cosas que puedes hacer contigo misma.
3. Cine: Ver película en casa puede ser muy divertido, pero, muchas veces me he aburrido de hacer eso y simplemente digo, “quiero ir al cine, pero, conmigo misma” y simplemente voy yo sola a ver la película que me de la gana, a la hora que yo quiera y me compro lo que yo quiera, cosa que también podrías hacer en tu casa de igual forma, con unas palomitas de maíz, lo que quieras, pero tu misma te comienzas a crear la idea que eres merecedora de lo mejor, que te das lo que mereces y que simplemente eres increíble.
Ese tipo de sensaciones atraerá más de eso a tu vida, la perspectiva de ti misma cambiará.
El cambio no es de un día para otro y es que al principio tu propia mente te podría hacer jugadas poco agradables, como hacerte sentir absurda, reírse de ti, pero recuerda que no somos donde estamos, somos todo lo que queremos y decidimos ser.
No les ha pasado que a veces guardan cosas para un día especial y para personas especiales, desde ropa o tazas o platos para un día y visitantes especiales y lo único que damos a entender en nuestro mundo mental es que hoy no es un día especial ni que somos una persona especial. Quítale la etiqueta a ese vestido que compraste y nunca haz usado por que lo estás guardando para un día especial y úsalo hoy!
Saca ese juego de tazas y platos y úsalo hoy para comer tu cena, tu eres esa persona especial!
Así empezaremos a vivir en ese estado de merecimiento y abundancia.
AMATE, ESE ES EL SECRETO, QUIEN SE AMA SE DA LO MEJOR